Escribo para que cuando lea esto en un año recordar como me sentía.
Me veo en el espejo, veo mis ojos, veo que no esta siendo nada fácil. Es la cosa más difícil que he tenido que hacer en toda mi vida, tratar de construir una nueva vida sin ti, encontrar una identidad que perdí de la peor manera, ver en lo que me he convertido, en lo que nunca pude llegar a ser.
Perder toda mi energía en intentar salvarme, tener que usar toda mi fuerza para dejarte ir a ser feliz con alguien que no soy yo y ver como ya no te soy suficiente. Perder todo lo que tengo en tratar de olvidarte, la persona en la que deposite toda mi fe, la que me dio todo lo que nunca tuve en la vida. Amor.
Díganme que fue fácil, aunque lea esto en 20 años sabre que es lo más duro que a mis 16 años me ha pasado, tener que perder a una persona que me amaba y tratar de avanzar de eso. Y ver como se me escapo de mis manos, no importa que haga, ver como se iba, como nuestro amor y nuestra relación se deshacía día a día, noche a noche, palabra tras palabra. Y como cada vez que parecíamos recuperla, cualquier cosa era capaz de destruirla, como cualquier avance para el era excusa suficiente como para largarse. Porque nunca lo hicimos funcionar, porque el nunca va a dejar que funcione. Porque se me hizo tarde.
Todos los altos y bajos, y se que el me quiere, que por eso después de todo seguimos juntos, que hay algo tan fuerte entre nosotros que nos une y que hace que nos necesitemos, se que nos amamos y es tanto el sentimiento que nos abruma, tanto el sentimiento que cuando se concentra puede ser terriblemente malo, atemorizante y destructor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario